Las necesidades educativas específicas son la consecuencia de un principio inherente a cualquier realidad social: la diversidad.

Entre estas necesidades nos encontramos a los alumnos cuya capacidad intelectual está por encima de la media y por ello requieren también de una respuesta educativa especialmente diseñada para ellos.

En el artículo 58 (antiguo 76 de la LOE) se recoge: “Corresponde a las Administraciones educativas adoptar las medidas necesarias para identificar al alumnado con Altas Capacidades intelectuales y valorar de forma temprana sus necesidades. Asimismo, les corresponde adoptar planes de actuación adecuados a dichas necesidades”.

Todos somos conscientes de las dificultades a las que nos enfrentamos a la hora de diseñar actividades para estos alumnos. Ajustar esta respuesta educativa supone tener claros cuales son las necesidades que presentan.

En general, se recomienda que se facilite que sea el propio alumno quien busque, encuentre y organice su propia información y elementos de aprendizaje teniendo en cuenta que necesitarán de la ayuda del profesor especialmente en  la búsqueda de dicha información.

OBJETIVOS

  • Adecuar la respuesta educativa a alumnos con altas capacidades.
  • Promover la investigación entre los alumnos.
  • Ayudar en el desarrollo de la inteligencia emocional de los alumnos.
  • Dar continuidad a programas similares de los centros adscritos.

CONTENIDOS:

  • Club de lectura
  • Talleres de contenido científico

Ambas actividades se realizan dentro del horario escolar 2 horas a la semana como máximo.

REQUISITOS:

  • Tener un informe de altas capacidades (CI superior a 120) del departamento de orientación o EOEP.
  • Alumnos con un percentil de 98 o superior en el test EFAI realizado por orientación a principio de curso en 1º ESO.
  • Preparar por su cuenta las clases a las que no asisten mientras acuden al aula de enriquecimiento.

EVALUACIÓN:

La evaluación tendrá un carácter continuo tanto por parte de los alumnos, de las familias y del propio centro. Al menos se harán dos evaluaciones por curso para ajustar las actividades que se realizan, una en torno a enero-febrero y otra a final de curso.